Desde hace años, todos los viernes por la tarde, se reunía una pequeña comunidad cristiana en nuestras instalaciones para hacer un ratito de oración y alabanza al Señor. Por desgracia, debido a la afluencia de gente que os habéis apuntado, gracias a Dios, a los grupos de matrimonios de la parroquia no vamos a poder ofrecerles un lugar reservado para ellos, debido a la falta evidente de espacios disponibles. Por eso, están buscando otra parroquia que pueda acogerles mejor.
¡Rezamos por ellos! Gracias por estos años de oración juntos.