Es el modo en el que la Iglesia Católica organiza oficialmente la atención a los desfavorecidos. Ya no se trata de «paternalmente» darles lo que nos sobre, sino de luchar por ayudarles a salir adelante. Se trata de una ayuda transitoria (no sólo económica, sino también formativa… ) para que puedan responsabilizarse de sí mismos y de sus familias, hasta que ya no necesiten ayuda.
Cáritas funciona a través de la red de parroquias, arciprestazgos y vicarías de la diócesis. De modo que para buscar ayuda cada persona tiene que acudir a la parroquia donde esté censado y desde allí podrá beneficiarse de la ayuda global de Cáritas en todos sus rangos. Por eso, es tan necesario que cada parroquia tenga su propio grupo de Cáritas para poder acoger con cariño, respeto y privacidad a cuantos lo necesiten, en su propio barrio.
¡Ayúdanos a ayudar! Muchas gracias